Como todo en la vida, hay colores que combinan mejor, personas que se llevan peor o mejor y sabores que pueden ser más agradables si se toman juntos. Es lo que llamamos maridaje.

Y si hablamos de maridaje, pan, queso y una copa de vino tinto es una apuesta ganadora. Puede que pasen siglos, pero siempre será una opción segura. Aun así, nosotros tenemos muchas más ideas de las que hablarte con todos nuestros panes de por medio. ¿Os animáis a conocer nuestras propuestas?

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Lo primero de todo: ¿Os imagináis una comida sin pan? Es cierto, hay alguno que se resiste, pero es solo hasta que se dejan llevar. Hay muchos tipos de pan y cada uno aporta unos sabores, algunos son mejores que otros para combinar con comidas o bebidas.

Por eso, hoy os queremos hablar de cómo maridar los panes que tenemos a vuestra disposición. Ya que empezábamos por el queso, una muy buena opción para tomar embutidos y quesos es el pan blanco, el de toda la vida. Nuestro pan artesano o la hogaza de molino de piedra son perfectos para este tipo de productos. Y, si os vais de excursión, un chorro de aceite, pan untadico con tomate y jamón serrano; todo dentro de nuestra barra de tobo. ¡Éxito asegurado!

Sin dejar de lado los quesos, pero añadiendo a la ecuación patés y mermeladas, contamos con uno de los panes más de moda del momento: el de centeno. Este pan de miga oscura y de semilla resistente es perfecto para combinarlo con algunos productos de carácter fuerte como los patés o los quesos de untar, y es una delicia para productos dulces y ácidos como las mermeladas.

Si hablamos de productos dulces, nuestro pan de naranja y chocolate es la estrella. En una tarde fría y de niebla o viento (os suenan, ¿verdad?), ¿hay mejor plan que tomar un chocolate con churros? La respuesta es sí. Moja nuestro pan con un poco más de chocolate y nos cuentas.

Como ya sabéis, en nuestros mostradores también encontraréis pan de cereales o integral. Para ellos, también tenemos ideas de maridaje. ¿Sabéis cuáles? Volvemos a las mermeladas ácidas, que le van perfectas a la miga amarga de estos panes. En realidad se pueden combinar con muchas más cosas. Son migas perfectas para tomar con ensaladas, platos ahumados, carnes rojas, guisos, para comer un ternasco de Aragón o para sopas frías. Incluso entran también en la lista de “pareja perfecta” los pescados y el marisco. Como veis, los panes integrales y de cereales son una opción versátil para muchos tipos de comidas.

Hasta aquí nuestras propuestas. No están mal, ¿no? Pero queremos más. Nos gustaría conocer cómo os gusta a vosotros combinar nuestros panes. Compártelo en tus redes y etiquétanos. Os leemos… ¡Y lo probaremos!

Nos vemos en el siguiente post.

Hasta entonces, ¡sed felices y salud para tod@s!